Reportajes

Gustavo Martín Audicio-23/05/2021

Me llamo Gustavo Martín Audicio, tengo 50 años. Nací en Villa Mercedes, San Luis, donde vivo desde siempre. Mis padres son Osvaldo Audicio, ya fallecido, y Blanca Nélida Morán. Mi padre nació en la localidad de Santos Lugares (Bs. As.) y mi mamá en la ciudad de Villa Dolores (Córdoba). Tengo 6 hermanos: René, Oscar, Walter, Carlos, Jorge e Ivana. Comparto mi vida con Anahí, mi señora, y mis hijos Martín de 16 años y Juan Ignacio, de 11.

Tuve la mejor niñez, rodeado de mucho afecto de mi familia, mis amigos y vecinos de mi querido barrio El Criollo. Recuerdo con mucho afecto jugar días enteros a las bolitas, las escondidas, las figuritas, con los barriletes hechos por nosotros y la carrera de autitos alrededor de la manzana, en esas calles de tierra de aquel entonces. Todo muy sano, inocente, nada de maldad.

Mis estudios primarios los hice en la Escuela Nº 371 Juan Bautista Alberdi, (ex- 241), que se encuentra al frente de mi casa paterna. Los estudios secundarios en el Instituto San Buenaventura y, de manera a distancia, empecé a estudiar periodismo deportivo, aunque no los completé por razones personales.

Desde que tengo uso de razón, me fascinaban los medios de comunicación. Por aquel entonces, y seguro muchos lo recordarán, en Mercedes teníamos acceso a pocos medios. En radio era nuestra LV15 y también me gustaba escuchar LV 16 Radio Río Cuarto.

En cuanto a la televisión, llegaba la señal de LV 90 Canal 13 San Luis, y por las noches ingresaban las señales de ATC y Canal 7 de Mendoza. Tuve el placer de trabajar con los pioneros de nuestra radio, Humberto Ottogalli, José Hugo Dutto, Fredy Zambrano, Titi Otazú, Oscar Di Sisto, Mario Guidi, Norma Trujillo, Ricardo Morán, Mirna Roncarollo de Andreotti, Oscar Vicente Escudero, entre tantos. No tengo una situación en especial que me haya hecho querer tanto a los medios de comunicación, porque desde siempre sentí esa atracción por ello.

Empecé hace 36 años participando con “bocadillos” en el programa “El Instituto del Aire” que aún conduce Héctor Pablo Ossola. Luego surgió Radio Acuarela, la primera FM y ahí estuve varios años con distintos programas, principalmente uno deportivo junto a Chacho Peñaloza, Norman Dacrema y Francisco Puglieli. Participé en la programación fundadora de Radio Sonix, junto a Oscar Di Sisto, Alberto Peralta y Daniel Toledo, entre otros. Hasta que llegó la oportunidad en LV 15 Radio Villa Mercedes donde primero cubría el turno de la tarde como locutor comercial y luego tuve mi propio programa.

Con el paso de los años fui socio fundador de Radio Libertador junto a Alberto Etcheverry, lugar donde innovamos la mañana haciendo un programa de manera simultánea por radio y televisión, que se llamó “Radio Para Ver” junto a Mario Echevarría, Mariana Ceballos, Norman Dacrema, Ricardo Olguín y Juan Ojeda.

Tengo dos momentos bisagras en mi vida. Uno fue sin dudas la muerte de mi padre, fue repentina, sorpresiva y hasta el día de hoy me cuesta asimilar su ausencia. Soy creyente, nunca culpé a nada ni a nadie, solo sé que está en un lugar mejor, donde algún día nos volveremos a encontrar. Y lo otro el nacimiento de mis hijos, que me hizo cambiar todo el sentido que tenía de mi vida, dejé de pensar en mí para pensar todo el tiempo en ellos.

Me emociona ver crecer a mis hijos, una buena película, una canción. Mi pasión pasa por la camiseta y el club más grande del mundo: Boca Juniors. Me enojan, y mucho, las injusticias, las desigualdades, el desinterés por los que más necesitan, el sufrimiento de un niño o un adulto mayor, entre otras cosas.

Me gustan todas las variantes musicales, pero me inclino por la música retro latina e internacional. Con las nuevas tecnologías leo mucho los diarios digitales del mundo, me gusta saber qué pasa del otro lado del planeta.

Mi tiempo libre lo disfruto mucho en mi casa, como se decía antes, soy muy casero. También disfruto mucho encontrarme con diferentes grupos de amigos y recordar tiempos pasados.

La principal enseñanza que me dejaron mis padres es la honestidad, yo hago un culto de eso y se lo transmito a mis hijos, me parece un valor fundamental y por supuesto ser buena persona, solidario, no morder la mano de quien te ayudó o te contuvo y también ser leal en todos los aspectos de la vida.

La amistad ocupa en mi vida un lugar principal. Tengo la suerte de haber cosechado excelentes amigos y amigas en mi infancia, adolescencia y actualmente. A algunos los veo más que a otros, pero sabemos que, si nos necesitamos, ahí vamos a estar como corresponde.

Mi relación con San Luis es de amor infinito a mi tierra, el lugar donde nací, desarrollé mis sueños, donde nacieron mis hijos. Ningún lugar del mundo, por más famoso y hermoso que sea, tiene la magia de tu ciudad natal, en mi caso, mi querida Villa Mercedes.