Expresiones de la Aldea, San Luis

Apenas diez años de una nueva vida…

Editorial

Este 22 de mayo salimos con un semanario especial. Justo el 22 de Mayo, y el Pueblo quiere saber de qué se trata. Y está ahí la esencia de cualquier esfuerzo editorial de esta índole. Radica en ese designio la responsabilidad de quienes consagramos nuestro esfuerzo laboral a completar cada semana una entrega que mínimamente satisfaga esa legítima y noble pretensión: saber de qué se trata. Esta responsabilidad se agranda porque esta publicación se concentra fundamentalmente en San Luis. Le debe al pueblo de la provincia de San Luis la razón de su existencia. Y no es poco. Para nosotros la puntanidad es un compromiso. Un serio compromiso que guía cada publicación. En cada noticia, en cada información, en cada entrega, es menester resaltar su relación con San Luis, su parentesco con esta tierra de hombres y mujeres esforzados, históricamente esforzados y seriamente comprometidos con su pasado, con su presente y la construcción compartida de su futuro.

Si además la pretensión se amplía intentando reflejar y respetar la cultura y el arte en todas sus manifestaciones, la gestión resulta tan interesante como comprometedora. Para quienes, desde aquel 19 de mayo de 2012, hoy hace diez años, somos tripulantes en este viaje fascinante de cada semana es un orgullo pertenecer a este medio. Nos honra, nos distingue, nos enorgullece. Una y mil veces volveríamos a sellar este inmenso compromiso con nuestros lectores y nuestras lectoras y con la sociedad de San Luis. Esta aventura quizás sólo sea posible en un espacio tan abierto, y tan propicio para el ejercicio pleno de la más absoluta libertad. Cabe, y como no, extender el agradecimiento a quienes desde lo comercial nos acompañan en cada entrega difundiendo sus empresas, sus emprendimientos, sus inquietudes. Son un elemento imprescindible en este encuentro semanal que cumple diez años y felizmente goza de muy buena salud.

Nosotros tenemos la sensación de ser un testimonio y un reflejo bastante cabal del quehacer cultural de San Luis. Ojalá nuestras personas destinatarias sientan lo mismo. Ojalá hayan encontrado en nuestras páginas una muestra de su identidad, un refugio seguro y cálido para sus mejores hábitos y manifestaciones. Es un inmenso placer compartir cada semana y es una obligación renovar el compromiso de cumplir con los/as lectores/as. De honrar nuestra profesión y nuestras profundas convicciones acerca de esta tarea que hemos elegido, como medio de vida, y como vínculo cierto con nuestros semejantes. En nuestra tierra, para nuestra gente y mostrando sus mejores esfuerzos y sus logros más sentidos.

Por lo expuesto y por el encuentro de cada semana desde hace diez años, MUCHAS GRACIAS.