Los rayos del sol tiñen de amarillo toda superficie que encuentran, atraviesan la ventana de la sala, con presteza. Allí hay una mesa, sillas, utensilios atentos a la caída del astro. Todo se torna dorado y hasta el polvo del aire se vuelve diáfano.
Atardecer- Prosa Poética con mención destacada- Homenaje a #RaquelWeinstock
De Natalia Araceli López