Por Alejandra Etcheverry

Me han señalado otra vez entre la gente,
por este ideal de paz y de grandeza,
más de uno ha pedido mi cabeza
y quieren que me calle y que no cuente.

Que hay un país que recuerda a nuestros muertos,
que tiene ideales que crecen y se abrazan
y que no miran los que con indiferencia pasan,
mientras otros nos reciben con corazón abierto.

Yo camino por todos los senderos,
a cada uno doy respeto en lo que siente.
Piense igual o piense diferente,
los escucho con interés verdadero.

Pero he visto brillar tanta arrogancia,
tanto machismo vulgar recalcitrante,
que me pregunto qué temor amenazante
despertamos nosotrxs para tanta intolerancia.

Estas manos que pintan y que escriben
Aman y glorifican lo que viven.