Soy María Belén Bravo, nací el 20 de enero de 1987 en Olavarría, donde viví hasta los 6 años, después nos vinimos a San Luis por razones de trabajo de mi familia, también aquí vivían mis abuelas.
Hice la primaria en la Escuela San Martín, mi amor por las ciencias nació en séptimo u octavo grado donde una profe me invitó a participar en una feria de ciencias. Me acuerdo que hacíamos biocombustible a partir del sorgo. Ganamos, era renovedoso el proyecto en ese momento y la profe una apasionada, que me enseñó mucho. Estudié en la Paula Domínguez de Bazán porque tenía orientación en Ciencias Naturales, aunque me quedaba lejísimo. Allí teníamos otro profe que nos enseñaba bastante sobre todo la parte práctica. Me fui a Mendoza a estudiar agronomía, tenía amigos allá, pero no me fue bien, me costó adaptarme.
Me volví a San Luis e hice la Licenciatura en Computación, pero tampoco me gustó. Me preparé en química para poder entrar en agronomía y me fui a Villa Mercedes, donde hice el final nada más, por todo lo que me había preparado. Éramos pocas, en un edificio de cinco aulas, con laboratorios chicos, vivía en la residencia universitaria, fue lo mejor que me pasó. Terminé la carrera en 2010, en 2011 rendí la tesis, me entregaron el título el 11 del 11 de 2011 (se ríe). Se abrió una convocatoria de becas en INTA y me alegró porque me quería quedar en Villa Mercedes, ya estaba de novia en la facultad, con quien estoy actualmente hace 16 años. Ingresé a una beca de práctica profesional donde me capacité en fitopatología en la Facultad de Ciencias Agropecuarias, donde había cursado, además de cumplir horas en INTA.
Como parte de una beca en la que hice una especialización en protección vegetal en la Universidad Católica de Córdoba; debía hacer una maestría que realicé en la UBA, de producción vegetal. En las pruebas de control vimos cómo los hongos pierden la sensibilidad a los controles químicos. Al finalizar la maestría pasé a planta en INTA, por decisión personal quise hacer mi doctorado. En el medio tuve dos hijos, Joaquín, de 7, y Tomás, de 2.
El trabajo sobre el hongo que afecta al maíz, está dentro del Doctorado en Biología que estoy realizando, nació como la respuesta a una demanda de la zona y no hay mucha información sobre nicotinas en maíz. Con el equipo estudiamos la presencia de Fusarium sp, un patógeno que afecta la calidad del grano en las plantas de maíz. Para mejorar la nutrición de las plantas y su estatus sanitario es fundamental reducir el impacto del agente infeccioso en el cultivo y su contaminación a otros alimentos, tanto para animales, como en seres humanos, ya que el maíz está presente en numerosos alimentos que consumimos a diario, en los animales puede producir hasta la muerte. Mi trabajo de investigación es sobre micotoxinas en maíz, producidas por distintos hongos. Otra investigación anterior es la relacionada al hongo en soja que se llama Cercospora sojina. Hacemos ensayos agrícolas para ver, determinar, hacer comparaciones de rendimiento, ensayos en distintos sitios de la provincia de soja, maíz, girasol, sorgo, algodón.
Un sueño mío podría ser ir a Liverpool, amo a Los Beatles desde que tengo 15 años. Además a mi hijo mayor también le gustan así que nos entusiasma la idea. Mis padres cantaban juntos y después mis hermanas y yo empezamos a tocar la guitarra con ellos, teníamos un conjunto, nos conocían por Los Bravo; anda un video de YouTube, sacamos un disco que también andaba dando vueltas por ahí. No sigo tocando, aunque por ahí lo hago. Agradezco la difusión, me ha llamado mucho la atención el tema y yo creo que cuando tengamos el resultado va a estar bueno seguir difundiendo porque es interesante.
El fin de esto es que les sirva a todos, no que quede como una investigación más, no solamente al productor para que entienda sobre su producto, sino también a la comunidad toda.