¿Nueva era?
Hallazgos en un lago canadiense revelan el inicio del Antropoceno
Los sedimentos depositados en el lago Crawford, en la provincia canadiense de Ontario, proporcionan pruebas inequívocas de que la Tierra entró en un nuevo capítulo geológico impulsado por el hombre -la época del Antropoceno- hace unas siete décadas, afirmó recientemente un equipo de científicos.
El Grupo de Trabajo sobre el Antropoceno (AWG, por su sigla en inglés), que llevó a cabo investigaciones en 12 lugares de todo el mundo a partir de sedimentos, suelos, corales y hielo, prevé presentar los indicios al organismo científico internacional que da nombre a las fases geológicas de la historia del planeta.
El plutonio procedente de las pruebas con armas nucleares realizadas en la década de 1950 proporcionó “un marcador muy claro” de la transición al Antropoceno, afirmó el presidente del AWG, Colin Waters, profesor de la Universidad británica de Leicester.
Otros indicios son el aumento del consumo de combustibles fósiles y fertilizantes, profundos cambios en el uso del suelo y un declive de la biodiversidad causado por la agricultura. En muestras del núcleo de los sedimentos del lago Crawford, cerca de Toronto, se hallaron plutonio y otras pruebas. “Llevamos 70 años de Antropoceno”, afirmó Waters.
“Ha sido tiempo suficiente, por la rapidez del cambio y la precisión del mismo, para reconocer que hemos pasado a este nuevo estado de la Tierra, y que debería definirse por una nueva época geológica”, agregó.
El Antropoceno, que reflejaría la transformación del clima y la ecología del planeta como consecuencia de la actividad humana, ha causado desacuerdo en la comunidad científica sobre cuándo comenzó y las pruebas que lo demuestran.
Aún no fue reconocido oficialmente por la Comisión Internacional de Estratigrafía. Si obtiene el reconocimiento formal, seguiría a la época del Holoceno, que comenzó hace 11.700 años al concluir la última Edad de Hielo.
“Es evidente que la biología del planeta ha cambiado bruscamente”, añadió Waters. “No podemos volver ahora al Holoceno”.
Según los científicos, los sedimentos del lago Crawford mostraban un “clavo dorado” que ilustra un cambio repentino -en términos geológicos- e irreversible de las condiciones de la Tierra. Los “clavos dorados”, que ponen fin formalmente a un capítulo geológico y dan paso a otro, podrían observarse en rocas, glaciares o sedimentos marinos durante miles de años.
“El registro del lago Crawford es representativo de los cambios que hacen que el tiempo transcurrido desde mediados del siglo XX sea geológicamente diferente del anterior, y merecedor -creemos- del clavo dorado”, afirmó Francine McCarthy, del AWG y profesora de Ciencias de la Tierra en la Universidad de Brock (Canadá).
Según los científicos, los sedimentos también reflejan una amplia gama de impactos humanos, como la lluvia ácida, el calentamiento global y la pérdida de biodiversidad.
El momento exacto en que comenzó el Antropoceno sigue siendo controvertido. Algunos sugieren que comenzó en la época de la Revolución Industrial de los siglos XVIII y XIX o antes. Según el equipo del AWG, los cambios más profundos no se produjeron hasta la década de 1950.
Fuente: Reuters-NA