«Todos siempre pendientes de nosotros, los que se llevan las peores partes, son una parte importante de nuestra vida… mucho dolor interno, tienen un incendio en la espera, un bombero necesita de una familia que lo sostenga y lo comprenda todo el tiempo. Quiero agradecer a la gente que siempre nos apoya, hemos podido sentir la solidaridad de nuestro pueblo en estos días. Para mí el baile y ser bombero son mis pasiones, gracias al baile conozco otros lugares del mundo y creo que el cuartel nos forma como personas, son una gran parte de mi vida y a las dos actividades les debo mucho».