EL NIÑO Y LA PALOMA
Por Alejandra Etcheverry
Una vez en una plaza vino a verme una paloma y se sentó muy tranquila como si fuera pichona. Y como yo era un niño que hablaba idioma de aves nos pusimos a charlar sobre pueblos y ciudades. Me contó lo que es planear y ver todo desde el cielo, extender así las alas en un arrobado vuelo. Me contó de otros lugares con personas y edificios, de caminos y quebradas, de valles, mares y ríos. Había andado por tanto, a pesar de ser pequeña, que quise saber entonces lo que los viajes enseñan. Le pregunté cuál de todos fue su lugar preferido, Y me dijo sin dudarlo, que ese sitio era su nido.
Muchas gracias!
Simple y bello! Me gustó
Qué hermoso Ale! Gracias por darnos unos minutos de volver a la esencia, con tus obras y poemas…
Por encima de vuelos y lugares, la escencia la tenemos en nuestra base hecha nido.
Muy bueno Alejandra me gustan los cuentos cortos y el Arte libre púe !
La belleza de lo simple…cuántas cosas dichas con pocas palabras…
La sabiduría de la naturaleza vive el aquí y ahora como el más preciado Presente. ¡Gracias Alejandra por este poema que enseña mucho !
El entrañable nido del alma, que nos acompañará en nuestra existencia…. Hermosas expresiones artìsticas, querida Alejandra, poema y pintura…..!!!
Muchas gracias por acompañarme con todos estos hermosos comentarios