Soy Santiago Adolfo Tello, nací el 6 de mayo de 1987 en la ciudad de San Luis, pero viví siempre en La Toma. Hice jardín y primaria en la Escuela N° 357 Máximo Camargo, a un par de cuadras de mi casa.

Desde los cuatro años me dediqué al fútbol, participé de los infantiles del Club Deportivo Pringles y del seleccionado en infantiles del Sub 15 de la provincia. Jugué un buen tiempo en la Liga del Valle de Conlara, y fui parte del Seleccionado de San Luis. Integré el equipo de La Punta, que dirigía José Sanfilippo. En mi familia el fútbol viene desde mi abuelo, “Tití” Suárez, él fue jugador e integró el seleccionado en su época, dos veces presidente del Club Deportivo Pringles. Mi viejo, Martín Tello, jugó en la primera del Club, y en el Club Atlético Colegiales de Villa Mercedes. Tuve una prueba en el club Boca Juniors. Cuando tenía 17 años, mi padre me acompañó a una prueba que se realizaba con 200 chicos del país y Sudamérica. El partido finalizó 3 a 1, con tres goles míos, pero no me eligieron. Fue un momento crucial y durísimo, me bajoneé muchísimo. El sueño de toda mi vida fue el fútbol, hasta el día de hoy no entiendo la decisión de quienes nos estaban probando, nunca me dijeron nada ni supimos qué estaban buscando. Todos los padres allí pensaban que yo estaba dentro de los elegidos, pero no fue así. Hasta allí llegó el sueño de jugar en el club de cual soy  hincha, además de poder llegar a primera y triunfar, que era lo que yo deseaba. Hasta los veintiún años seguí entrenando solo, participando en campeonatos de verano, con la esperanza de poder jugar en algún club. Empecé a trabajar en una fábrica, mientras entrenaba, pero después de varias  lesiones me resigné.

La música llegó a los 21 años, yo escuchaba todos los estilos musicales, desde lo que les gustaba a mis viejos, como Los Iracundos, Leo Dan, hasta lo que me pasaban mis hermanos mayores: La Mona, Jean Carlos, La Barra, Trulalá, pero jamás pensé que terminaría cantando. Al recibir la indemnización de la fábrica me compré equipos para ensayar. Un día fui a un karaoke y canté por primera vez, a la gente le gustó, y me empezaron a convocar. En mi fiesta de cumpleaños me vio Gastón, un amigo de mi hermano Alejandro, y me propuso cantar en un boliche. Le agradezco, porque así arrancó mi carrera, en mayo del 2008.

Canto lo que decida la gente, mi fuerte es el género tropical, el melódico tropical, gustan también las canciones del rock nacional, algo de folclore y latinos, algo de la época de mis viejos. Hace doce años que canto, he actuado en lugares importantes, con artistas a nivel nacional como Sabroso, con Jean Carlos, el “Negro Videla”, el “Rey Pelusa”, Ángela Leiva, con Antonio Ríos, Tambo Tambo, y Trulalá. Hice presentaciones en Buenos Aires, parte de Córdoba, Mendoza, La Pampa. En una oportunidad me invitó a cantar el “Rey Pelusa”, uno de mis ídolos de Córdoba. Me llamó entre la gente, yo ni lo esperaba, me había estado escuchando anteriormente.

En Arizona, cuando estuvo Sabroso, el cantante “Wally” Mercado me llamó desde el escenario, yo estaba en camarines y pensé que estaba llamando a uno de sus músicos, con él canté “Zamba para olvidar”. Con el “Negro Videla” canté, pero ya lo habíamos hablado un rato antes. Son grandes, no solo como artistas, sino también como personas, muy humildes. Estoy en YouTube, tengo con mis canciones, y el año pasado compuse una canción llamada “Juntos tú y yo”, que fue premiada por Cablevisión en un concurso con más de 500 participantes de 26 países, y me dieron un reconocimiento a nivel internacional.

Le canto mucho a la vida, valorándola, una de las canciones que compuse se llama “La vida es un milagro”… Hemos pasado momentos duros, poder abrazar a la familia es algo para celebrar.

Me dedico ciento por ciento a la música, brindo un servicio integral, esperando siempre que se reactive la actividad.

Mi familia está compuesta por mi madre Raquel y mi padre Martín, mi compañero de viaje, mi hermano mayor Cristian, mi hermano del medio se llama Alejandro, y el más chico soy yo; mi novia es Agustina, mi hija del corazón se llama Mía, y mi sobrino es Valentín.

En Facebook y YouTube estoy como Santiago Tello, en Instagram @santiagotello87. Deseo que pronto toda esta pandemia se acabe, que podamos salir a la calle y festejar, vivir sin miedos, que la gente tenga paz, y bendiciones para todas la familias.