Reportajes

Cristhina Beatriz Giménez,15-01-2023

Me llamo Cristhina Beatriz Giménez, tengo 61 años, nací en la capital de la provincia de Mendoza, hace 8 años que resido en la ciudad de Villa Mercedes, San Luis. Mi padre se llama José Francisco Giménez, de profesión perito contable, mi madre Rosa Ester Canciani, ama de casa, ambos oriundos de Rivadavia, Mendoza. Tengo dos hermanos, Francisco Lino (ya fallecido) y Domingo Alfredo Giménez. Desde el año 2015 que estoy casada con José María Cincunegui. Tengo dos hijos con mi pareja anterior, Natalia Lorena de 37 y Martín Alberto de 34.

Lo que más tengo presente de mi niñez es que fue una niñez muy bonita, dentro de todo, con ciertas limitaciones por el trabajo de mi padre, pero muy bonita, con muchos juegos: la payana, la mancha, las escondidas, jugar en la vereda hasta altas horas de la noche, lo recuerdo con mucho cariño y nostalgia.

Mis estudios, la primaria la terminé en el Instituto Nadino, era un anexo del Instituto Leonardo Murialdo. Y la secundaria en el Liceo Agrícola Enológico Domingo Faustino Sarmiento.

La música estuvo siempre presente en mi vida, mi padre era un apasionado de la música y la fotografía, coleccionista de LP de todos los géneros habidos y por haber, tenía gabinetes completos de discos, y era de escuchar música permanentemente, grabar cassettes en ese momento. Participaba y adoraba estar en el coro del colegio primario. Tenía un tío que era cantante de tango, me gustaba mucho la música y me gustaba cantar, hasta que un día me decidí y estudié guitarra y canto. Mi padre y mi tío fueron mi gran inclinación para que yo me dedicara a esto de la música.

Estando en Mendoza comenzamos con quien es hoy mi marido a cantar, él tenía su show y yo el mío, y cuando llegamos y nos instalamos en Villa Mercedes comenzamos a cantar como un dúo, que se llama “Cristhina y Pablo”, dentro del show que brindamos con un amplio repertorio, también hay secciones como solistas de ambos, interpretamos música de todos los ritmos y géneros, desde lo melódico, folclore, música movida, entre otras. Hemos grabado en material discográfico en Casa de la Música.

Cuando me separé dije: “bueno, ahora dedico más tiempo en mí, hago lo que me gusta”, y la música era estuvo siempre latente y empezó a surgir, y me metí de lleno con la música por mi futuro. La bisagra fue mi separación.

Soy una mujer feliz, humilde, soy pacífica, honesta, leal, trato de superar todos los escollos en la medida que se pueda, creo que soy valiente, más o menos eso sería una definición sobre mí.

Me conmueven palabras, lecturas, hechos, personas, mucho de esto me conmueve hasta las lágrimas, soy muy emocional en ese sentido. Mi pasión es la música y el canto. Me molesta la injusticia en la gente, el dolor que sufren los animales, y si puedo trato de ayudar.

Me gusta escuchar todo tipo de música, tengo mis preferencias, la música romántica, las baladas en español y en inglés, los boleros, el folclore argentino, la salsa, me gusta escucharla y bailarla, escucho de todo y aprecio todo tipo de música. Me gusta leer novelas, libros de misterio, de historia.

No me gusta estar ociosa, no me satisface estar sentada viendo tele todo el día o sin hacer nada, me gusta estar activa, pero si hay una escapada o un viaje a la playa, bueno ahí sí, obviamente desde ese lugar disfruto estar sin hacer nada.

Como una enseñanza de mis padres, en primer lugar, diría que el respeto hacia los mayores, siempre he tratado a todo aquel que sea mayor de usted, me sale instintivamente, la puntualidad en todo momento de la vida, porque ahí se basa el respeto al otro, el respeto y el aprecio por animales, la humildad, respetar a la autoridad. Muchas cosas me marcaron mis padres, tratar a los demás con dulzura y tratar de demostrar mis sentimientos.

Cosas que a mi parecer se han perdido últimamente, sobre todo el respeto por el otro, la puntualidad, hoy en día hay a quienes no les importa llegar tarde a una reunión o a un ensayo. El trato, la intolerancia de la gente, por cualquier cosa se alteran en la calle.

La amistad estaría en un tercer lugar en mi vida: primero la familia, mi marido, mis hijos, segundo la música, lo que me apasiona hacer, y la amistad, algo que es muy importante, conservo amistades de la escuela, tanto primaria como secundaria, y mi principal amigo es mi marido.

Con respecto a San Luis, particularmente Villa Mercedes, me han tratado muy bien, es muy positivo el saldo que tengo, para mí y mi familia, si bien extraño mucho Mendoza, soy feliz acá, he conseguido y he llegado a tener muchas cosas positivas, muchos proyectos llevados a cabo aquí, con el tema de la música ha sido más que nada donde más me he desarrollado. San Luis es muy lindo, en Villa Mercedes hay lugares muy bonitos.