Por Polaco Altavilla

“Hacemos un homenaje al Bocha Sokol en los temas de Las Pelotas que cantaba Alejandro, y algunos de El Vuelto, también, la banda que tuvo al irse de Las Pelotas, con su hijo, Ismael: hacemos solamente los temas que canta Alejandro”, dejó en claro Wally D’Angelo, vocalista de Corderos en la Noche, del material a interpretar. “Hay una excepción o dos, que son de esa época, como Capitán América, por ejemplo, que lo canta Germán, pero es un clásico y lo hacemos porque la gente lo pide, pero no, temas nuevos de Las Pelotas, no, no hacemos”.

Otra particularidad de Wally D’Angelo, la voz del combo nacido en la ciudad de Rosario, Santa Fe, en julio de 2016, en base a la admiración por la historia y la música de Alejandro “Bocha” Sokol, uno de los miembros fundadores de Sumo, que nació en Hurlingham el 30 de enero de 1960 y falleció en Río Cuarto, 12 de enero de 2009, es que nunca se conocieron personalmente. “Nunca tuve la oportunidad de verlo cara a cara, de hablar con él y saludarlo, lo vi arriba del escenario”, aclaró Wally. “Como soy de Rosario, en el interior no está la posibilidad como en Buenos Aires, que estás ahí en el barrio y lo ves que pasa caminando, ¿viste? que se yo, acá no es así, entonces no tengo fotos con él ni nada”.

Pero su inicio en la carrera de mantener el legado del Bocha se debía al fanatismo y su parecido físico. “Así empezó todo, con eso del parecido, cuando íbamos con un amigo a ver a Las Pelotas y veíamos a Alejandro me decía ‘ese es tu hermano’ -jaja- y yo me decía ‘no puede ser’. Cuando era más joven era más parecido todavía, y empezó así todo esto. Con la desaparición física de Alejandro, con este mismo amigo, que era batero, decidimos hacer una banda tributo, para hacer los temas que cantaba el Bocha. Es muy distinta la impronta y la forma de cantar de Germán (Daffunchio) a la de Alejandro, entonces, lo metimos con eso. A través de redes sociales, con el tiempo nos empezaron a ver en partes de Buenos Aires, en el Oeste, por Hurlingham, Morón, Merlo, zona que es muy ‘pelotera’ y del palo de Sokol, empezamos a salir de Rosario, de donde somos, y así arrancó la gira por el resto del país”.

“Siempre, siempre la reacción de la gente es lo mejor”, dejó en claro D’Angelo del contacto con su público. “La recompensa es el fervor de la gente, del fan que participa, que se acerca, el afecto, el abrazo, la foto, que incluso uno hace gente amiga, que después te escribe o te dice ‘che, vengan a comer a casa’. Siempre, lo fundamental y lo mejor de todo es la relación con las personas, con gente nueva que uno va conociendo, como en este caso, con Diego Avaro, que nos contactó por primera vez”, precisó el artista de su colega villamercedino, también músico y que incluso se sube a tocar congas en algunos temas. “Diego es un amigo, nos cruzamos, nos hemos encontrado en varios lugares”.

“Esta es la única banda que tengo. La idea desde un comienzo, cuando se hizo un tributo, es que la gente quiere ver lo que veía hace 25 años, fue la idea siempre: que sea lo más parecido posible”, especificó Wally de la intención. “Yo no hago la voz de Alejandro, esta es mi voz, es parecida porque es casualidad, no estoy impostando ni armando una voz, y por ahí con gestos o movimientos en el escenario… la voz y el parecido físico es casualidad, salió así. Aparte de eso, tenemos un disco con temas propios y hacemos nuestra música, pero yo solamente me dedico a Corderos en la Noche, no tengo otras bandas, no me interesa”, aseguró Wally. La banda editó su primer álbum, Sin Miedo, en 2021 y se consigue en todas las plataformas digitales.

Corderos en la Noche ofrece conciertos que superan las dos horas, con un mínimo de 25 temas de la era Sokol en las Pelotas. “Hacemos los clásicos, hay de todo un poco, hay un set acústico con algunas canciones que hago solo, con una guitarrita pero fundamentalmente un show lindo para ver, con la banda bien afiladita, con ensayo, con mucho laburo, nada improvisado, está bueno para ver y rememorar la era Sokol de las Pelotas”, sostuvo Wally del grupo bautizado como el disco y la canción editados en 1991.