El puntano Miguel Ángel Herrera fue protagonista de las páginas doradas del boxeo nacional. Y además fue uno de los abanderados y exponentes de la puntanidad.
Sus hazañas lo convirtieron en leyenda. En el mundo del boxeo sanluiseño siempre se habla de su legado, de sus victorias y derrotas. Pero siempre dejándolo todo en el cuadrilátero.
Entre los recuerdos imborrables está la pelea que, en el ring side del club Guay Curú (calle General Paz a pasitos de Pringles), libró con el excampeón mundial Pascual Pérez.
Estas imágenes, aportadas por el fotógrafo de El Diario Mario La Torre, son el testimonio de la popularidad del gran “Come clavos”, bautizado con ese apodo por el promotor de box “El Chiñe” Molina. Fue cuando lo vio un día arreglando un techo con unos clavos en la boca: “A vos te digo, ‘Come clavos’”.
En uno de los registros fotográficos se lo ve combatiendo en Mendoza.
En otro, con sus seguidores tras un festival en “Guay Curú” y en la tercera imagen, en una entrevista con el periodista “Jhonny” Díaz, para la página “San Luis y su gente”.