La Aldea y el Mundo, Notas Centrales

Cuerpo y palabra: Slams de poesía

Eliana Cabrera

Devenimos de una fuerte tradición oral, de historias de todo tipo que circularon de boca en boca mucho antes de ser escritas en papel, incluso muchas mantuvieron esa exclusividad oral y actualmente no existe un registro concreto de su existencia.

Desde los cantos de los pueblos originarios, pasando por la puesta en escena callejera de trovadores y juglares, ¿cuántos poemas y relatos quedaron en el olvido? Sin embargo, hay algo de esa poética del instante, presenciada de forma única e irrepetible, que los slams de poesía están reviviendo.

“Slam” es una palabra onomatopéyica que en inglés alude a golpe fuerte, portazo, estrellarse, “darse contra”.

Esto ya nos da una pista acerca de los propósitos de los slams de poesía.

Se trata de falsos torneos de poesía oral performática. ¿Por qué falsos?

Porque si bien se trata de una competencia y finalmente se busca una ganadora o ganador, cualquiera puede participar siguiendo tres simples reglas: que el texto sea propio, que dure un máximo de tres minutos y que sea leído de pie, a menos que exista algún impedimento físico. ¿Quién resulta ganador? Aquella o aquel que emocione, impresione, “golpee” más al jurado con su puesta en escena.

En Argentina, estos torneos de la palabra en escena cumplieron diez años en el 2020, pero tienen sus orígenes en la década del 80 en Estados Unidos, cuando Marc Smith inició una serie de recitales poéticos en un club de Jazz llamado Get Me High Lounge. De allí en más, la práctica se extendió y hoy existen slams de poesía en muchos otros países y regiones.

¿Qué ocurre en estos eventos? Básicamente se trata de espectáculos orales, recitado de poemas originales representados de forma orgánica, es decir que el poema no se trata solamente de lo que se pueda decir con las palabras sino también de lo que se transmita a través del tono de voz, los gestos y el cuerpo.

Marc Kelly Smith (nacido en 1949) es un poeta estadounidense y fundador del movimiento de poesía slam, por el que recibió el apodo de Slam Papi.

Los slammers (así se autodenominan quienes participan de esta actividad) tienen total libertad para expresarse, de modo que presenciar estos torneos es estar inmerso en toda una pluralidad de voces y formas de darle presencia al cuerpo atravesado por el poema, transmitiendo esa intensidad y pasión al público.

Slam Argentina (@slam.arg) comenzó su décima edición el año pasado. El 4 de septiembre fue la final del torneo, entre los ocho finalistas de los slams regionales: @michsinte de Slam Digital, @paulagialdroni de Slam Chaco, @ventonegrojako de Slam Zona Sur, @gero_tartara de Slam Rosario, @melquiadeslionel de Slam Posadas ,@flaco_scaramuzza de Slam Pergamino, @huesodejilguero de Slam Mendoza y @checha_kadener de Slam Capital, quien resultó ganadora. Ella será nuestra representante en la primera edición de Slam de las Américas en Sao Pablo, Brasil, y cuyo ganador o ganadora pasará a la meta final de los slammers: el Slam Poetry Mundial que se realizará en Bélgica.

Si bien el torneo fue trasmitido por Zoom, debido a las condiciones de distanciamiento social ya conocidas, en cada cuenta de Instagram de los slams y participantes mencionados pueden encontrarse videos de algunos recitados para poder conocer a cada poeta y, por qué no, seguirlos en los próximos eventos.

Más allá de la competencia de Slam, no dejan de surgir espacios de micrófonos abiertos y de talleres para ejercitar el uso de la voz y las habilidades teatrales para llevar el poema al cuerpo y viceversa.

Desde la virtualidad, Salva Soler es un slammer barcelonés, poeta y actor que desarrolla en un video de Youtube https://youtu.be/AR0WMa2BSzE cómo crear un poema orgánicamente, conectando voz, cuerpo y emoción.

En esta suerte de tutorial, Soler explica y ejemplifica cómo entablar un diálogo entre el poema y el público, proyectar la voz y lograr que el cuerpo sea un elemento más de la expresión poética.

Es un video recomendado como puntapié para iniciarse en esta práctica, que más allá de lo competitivo (que de todas formas no se trata de combates directos ni duelos en los que se enfrenten improvisadamente los y las artistas) se trata de una experiencia que hace del lenguaje poético una acto de provocación y expresión íntima y pública de colectivos y diversidades.

Poetas, actores y actrices, cuentacuentos o raperos, recién iniciados, estudiantes y profesionales, todos y todas haciendo carne la palabra, dejando de lado por un momento al libro y el papel para darle al presente inmediato toda la intensidad que sus voces y cuerpos puedan brindar para que, aunque sus poemas no queden plasmados por escrito, encuentren su refugio en la memoria de la emoción.