Reportajes

Brenda Eva Quiroga- 15/08/2021

Soy Brenda Eva Quiroga, nací en Florencio Varela, Buenos Aires, el 25 de junio de 1989. Allí viví hasta los 16 años, cuando nos mudamos a Carpintería. Mi padre y abuelos eran nativos de aquí, siempre veníamos de vacaciones. Soy mamá de Guillermina Eva, de casi cuatro años, que es la creación más perfecta del universo.

Mi mamá se llama Mónica Rolón, es Licenciada en Trabajo Social, y trabaja en el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, mi papá es Guillermo Quiroga, conocido como “siete oficios”, siempre está disponible para todo lo que se nos ocurra desde mecánica, carpintería, pintura y actualmente lleva adelante un proyecto de la Secretaría de Cultura, donde yo desempeño mis funciones, que es la Granja Municipal de Carpintería. Mis padres son militantes de toda la vida, que es una de las cosas que más me enorgullece y que compartimos en familia.

Crecí en un ambiente de unión y amor familiar, pude acceder a un gran colegio privado de nuestro barrio, Santa Rosa, “Padre Faustino Mauricio Mennel”, donde además de lo curricular fue un lugar de apoyo, contención y muchos valores, agradezco a la vida los amig@s, profesoras y profesores  que conocí allí.

Pero el contexto de mi alrededor no era igual, amigos del colegio, y sobre todo del barrio donde vivíamos, yo desde muy chica percibía las necesidades de los pibes y pibas de mi edad, y me partían el alma, me era muy difícil entender cómo había familias que no tenían dónde vivir o qué comer, haber conocido tan de cerca esas situaciones me convenció de que la militancia es la única herramienta de transformación para que nosotros podamos cambiar la realidad de nuestro pueblo.

Me crie en una unidad básica, todavía existente en Varela, llamada Evita Descamisada, desde allí pude compartir y ver el trabajo de mis padres, mi abuela y todos los compañeros. Organizábamos, desde la sociedad de fomento, comparsas, día del niño, corsos, colonia de vacaciones, talleres deportivos y culturales, comedores, obviamente actos políticos, movilizaciones, plenarios.

Terminé el último año en el Instituto Monseñor Orzali y empecé a trabajar de lo que salía, moza, ayudante de cocina, limpieza de cabañas, cuidado de niños. Ayudaba a mi mamá de voluntaria en la inscripción al programa manos a la obra. Además me ofrecía voluntariamente en el pueblo, días del niño, fiesta del chivo, trabajé en la comisión club de fútbol local.

Cuando se creó la AUH me ofrecí nuevamente a la Municipalidad de Carpintería para la inscripción como promotora territorial, después de una semana de trabajo el intendente me ofreció ser secretaria del Juzgado intermunicipal de faltas, donde estuve cerca de cinco años, y después estuve en la Secretaría de acción social.

En 2015 me fui del municipio decepcionada de la política, pensé que nunca más volvería a involucrarme y aproveché para capacitarme haciendo cursos de gestoría del automotor y de secretariado Jurídico y Juez de Paz.

En las elecciones del 2017 estaba embarazada de Guillermina Eva y me presenté porque necesitaba militar, porque no quería que en la provincia avance el neoliberalismo, hicimos una gran campaña en el departamento. A comienzos de 2019 recibí la invitación para sumarme al equipo de Gastón Herrera, el actual intendente, y no dudé en sumarme porque soy peronista desde la cuna, con una vacuna kirchnerista en la adolescencia. Fue una elección épica, estuvimos muchas horas sin luz, un día de frío polar y lluvia, estaba como fiscal general haciendo cuentas y viendo que nuestro sueño se hacía realidad.

Soy profesora de folclore y tuve la oportunidad de participar en grandes escenarios de San Luis y de otras provincias, por la pandemia y el trabajo tuve que dejar de bailar, pero mi sueño es poder seguir haciéndolo toda la vida. No tengo mucho tiempo, pero desde hace un mes empecé con una compañera un programa en radio municipal que se llama “Somos cultura”, que disfruto y trato de compartir en familia.

Siempre admiré la gran administración de la provincia, la transparencia y sobre todo las políticas sociales que implementaban, hoy, después de tantos años, formar parte de este gran equipo provincial y conocer a tanta gente maravillosa me hace muy feliz. Estoy en la Secretaría de Cultura y Protocolo del municipio y me sigo capacitando, acabo de terminar el curso de Gestión Cultural Pública y estoy cursando una Diplomatura en Políticas Sociales para la Gestión y el Desarrollo Local.

Mi grupo familiar está compuesto por mi hija Guillermina Eva y mi compañero, Jorge, mis padres, mis hermanos Aldana, Gilda y Sebastián, mi ahijada Emma Piuque, y mis amigos y amigas que son mi gran familia.

Encabezar la lista de concejales es un desafío, hace quince años que milito en la provincia, no era algo que estaba en mis planes, pero estoy muy comprometida con este proyecto político, mis compañeros y dirigentes querían que encabezara la lista y este era el momento. Trabajaremos para aportar en lo necesario en este concejo nuevo, y muy feliz de tener esa posibilidad.

(*) Fotografía de Leo Tettamanzi