BITÁCORA DE PANDEMIA
Hojear sin juzgar el cuaderno de bitácora de viaje en esta pandemia en el que diferentes y distantes personas escriben reflexiones y sentires de esta historia
La Opinión/ La Voz del Sud
Nos asomamos al cuaderno de viaje en pandemia de Cecilia Miranda, nutricionista de Villa Mercedes:
Creo que la pandemia ha sacado lo mejor y lo peor de cada uno. No sólo de cada uno de nosotros, sino de cada una de las sociedades. La pandemia ha potenciado los sentimientos… el amor, el odio, la felicidad y la tristeza, y en mi caso pude aprender muchísimo de todas las situaciones.
En lo laboral, me tocó estar en el frente de batalla junto a un equipo médico que no se tomó respiro y estuvo a la altura de las exigencias y las circunstancias.
El policlínico regional tiene un maravilloso grupo humano y profesional. Junto a mis compañeras del servicio de nutrición realizamos un trabajo incansable, desgastante pero que nos llena de satisfacción al poder visualizar cómo los pacientes progresan.
Fernanda Belloso, ciudadana de San Luis reflexiona:
Desde los comienzos de la civilización, la humanidad ha vivido etapas durísimas, según los archivos han existido muchas pandemias que han tenido índices de mucha mortalidad, pero al parecer nada como la que nos tocó vivir por estos tiempos, donde el mundo por completo se vio involucrado, ¡vaya si son tiempos difíciles para el planeta!
Si no me equivoco, de los últimos cien años para acá no hay nada parecido a esto, este virus dio un duro golpe a la humanidad mundial, se cerraron fronteras entre países, se aislaron ciudades, pueblos, el terror había ganado su primer batalla.
La repercusión social ante este fenómeno no siempre es la misma, dependiendo de la condición cultural de cada pueblo o ciudad, de sus gobernantes, algunos de ellos que han dejado mucho que desear en la conducción al camino correcto, ignorando las recomendaciones de las instituciones globales como la OMS, entre otros, para proteger a sus compatriotas, a sus hermanos de sangre, debido a estas irresponsabilidades muchas vidas se perdieron, la condena social para ellos debería ser permanente.
Como sociedad creo que hemos recibido una advertencia muy importante, estará en nosotros si podemos entender la grandeza de esta crisis, del daño que le hemos producido al planeta con la contaminación de la humanidad, y que esto tiene consecuencias, como sociedad quedará marcarse un objetivo con la mayor calma y tranquilidad, sin tener que llegar a los extremos, razonando y analizando así las causas que nos llevaron a vivir esto, para no repetir tanto daño, ni de un lado ni del otro. Es el deseo de todos.