Claudio Zabala-05-06-2022
Mi nombre es Claudio Zabala, nací el 23 de julio de 1966 en Santa Rosa del Conlara, San Luis. Mi padre Vicente era taxista, le decían “Don Pochocho”, mi madre Rita, vicedirectora de la escuela primaria de Santa Rosa, falleció cuando yo tenía nueve años. Tengo dos hermanos, Liliana, maestra jardinera, que vive en Buenos Aires, mi hermano es Ingeniero Químico, vive en San Luis. Tuve una infancia muy linda, cursé primaria y secundaria en mi pueblo, éramos muy unidos, muy amigos con mi padre, con quien compartíamos mucho tiempo juntos porque mis hermanos ya se habían ido a estudiar.
A los dieciocho me tocó a mí, me fui a estudiar Contaduría a Córdoba, recuerdo los primeros años del gobierno de Raúl Alfonsín, con el plan austral, era bastante fácil vivir en Córdoba, pero después se complicó, la economía comenzó a tener problemas, la inflación se disparó al cincuenta por ciento, y eso me dificultó recibirme rápido, pero lo logré.
Volví a la ciudad de San Luis, en ese momento estaba finalizando la promoción industrial, pude trabajar en un estudio importante donde aprendí mucho, después pude abrir mi propio estudio con unos abogados, y ya en 1998 tuve la oportunidad de ingresar a la multinacional Techint, en un comienzo en Buenos Aires, después me trasladaron a San Pablo para trabajar en la contabilidad interna de la multinacional, hice muy buenos amigos y aprendí mucho sobre el sistema impositivo de Brasil y también de nuestro país; son contabilidades similares pero sistemas diferentes. En mi función tenía que adaptar el sistema impositivo de la sede Buenos Aires para hacer los informes.
Luego me trasladaron a Salvador de Bahía, a setenta kilómetros de allí estaban terminando la refinería “Landulpho Alves”, que hasta hoy sigue siendo la segunda refinería más importante de Brasil y la segunda el mundo con un sistema de reutilización del petróleo, aprovechando el combustible que otras refinerías desechan por su baja calidad. De ese proceso obtienen diesel y naftas de buena calidad, a la nafta la mezclan con alcohol. Es una refinería muy importante, hoy ya está privatizado, yo estuve en la parte final de ese proceso, fui Jefe de Servicios Generales.
En su momento llegamos a manejar la alimentación, seguridad, vestimenta y transporte de cinco mil obreros, ya que no había localidades tan grandes que proporcionaran esa cantidad de personal de manera local. Para mí fue muy importante desde lo personal y profesional, el trabajo en esa magnitud fue increíble, además en una de las refinerías más importantes de la región pudimos finalizar con éxito, y fui felicitado por no tener que lamentar ninguna pérdida humana, ya que es un trabajo de los catalogados de altísimo riesgo. Por entonces mi localidad, Santa Rosa del Conlara, no llegaba a tener cinco mil habitantes, y mis compañeros comparaban mi trabajo con darle de comer, vestir, transportar y darles seguridad a una localidad como la mía.
A fines de 2001 volví a Buenos Aires porque ya se habían finalizado las obras más importantes, viví los momentos de crisis de nuestro país, la renuncia de Fernando de la Rúa y todo el conflicto que hubo entonces, no me gustó vivir allí así que me volví a San Luis. Adquirí mi estudio en la calle Falucho de la ciudad de San Luis y mi departamento de planta baja y primer piso, abrí mi estudio y también comencé a trabajar para el Gobierno de la provincia, al principio contratado y luego en planta permanente, ocupé los cargos de Jefe de Programa Fomento a las Inversiones, Jefe de Área de Asuntos Municipales, y trabajé en distintos sectores de Obra Pública, del Ministerio de Hacienda y de Recursos Humanos; siempre agradecido al gobierno que me permitió ocupar muy lindos cargos para aprender y desarrollar toda mi experiencia.
Hoy estoy con licencia sin goce de haberes, porque comencé con un proyecto personal que se había frenado por la pandemia y este año ya está en marcha, los pasos siguientes son abrir oficinas en Buenos Aires, trabajando con empresas de allá, y en los próximos meses oficinas también en San Pablo, Brasil, para trabajar en Comercio Exterior a través de productos brasileños y argentinos, la idea es llevar artículos regionales de cuyo y traer tecnología que está a buen precio.
La principal actividad que va a tener mi estudio de ahora en más será la inversión en monedas digitales, fondos comunes de inversión digitales, carteras digitales y criptomonedas, ese es el gran proyecto que ya inicié, por ello me estoy dedicando cien por ciento a ello. El año pasado obtuve la Diplomatura “Un Puente hacia China” en la Universidad Nacional Córdoba, Facultad de Ciencias Económicas, relacionado a la actividad comercial con el gigante asiático, también es una meta para 2023. En este momento me encuentro con toda la fuerza y la capacidad para desarrollar estas nuevas actividades a través de mi estudio, que tiene los pies en San Luis y los ojos hacia el mundo.
Excelente. Un merecido reconocimiento para un gran profesional. Pero, fundamentalmente, para una gran persona. Quienes tenemos la fortuna de conocerte, nos alegramos sinceramente. Felicitaciones, Claudio.