EL CENSO
Por José Villegas
El 4 de agosto de 1812, por fin es presentado oficialmente el informe del primer censo poblacional de San Luis. Total de habitantes en la jurisdicción: 16.837, los cuales se componen de la siguiente manera: 4.563 indios; 1.473 negros y mulatos; 25 españoles peninsulares; 10.668 criollos. La ciudad de San Luis poseía 1.603 habitantes distribuidos por sexo y clases de la siguiente manera: Blancos: 397 varones, 491 mujeres; Indios: 91 varones, 193 mujeres; Libres: 142 varones, 214 mujeres; Esclavos: 36 varones, 30 mujeres. Aunque no existía un plano de la ciudad, sabemos que el ejido urbano estaba dividido en 3 cuarteles, y los responsables del censo por cada cuartel fueron: Cuartel 1°: Alcalde de Barrio Don José Manuel Rivero; Cuartel 2°: Teniente Don Mateo Gómez; Cuartel 3°: Alcalde de Barrio Don Juan Manuel Pando.
El Cuartel 2° era el más poblado, con 255 varones y 368 mujeres. En él se concentra la mayor cantidad de ocupaciones textiles (hilanderas, tejedoras), de peones y artesanos. No hay un solo esclavo y en dicho espacio se ubica el cura párroco y cuatro frailes de los cuales el censo no especifica la orden a la que pertenecían.
La población foránea de San Luis en 1812 está compuesta en su mayor número por españoles peninsulares. Existe un elevado número de portugueses y sólo un inglés (Enrice) y un francés (Daract). Los provincianos que habitan la ciudad tienen como predominantes a los mendocinos, seguidos por bonaerenses, cordobeses y riojanos. Todos, abarcan el 4,20% de la población total. Esto quiere decir que la inmensa mayoría de la población puntana era nativa de su provincia.
Según el profesor Emiliano Endrek, miembro de la Junta de Historia de Córdoba, cuando se refiere a la estructura social, sostiene que “el grupo blanco, numéricamente predominante, hace de San Luis una de las pocas ciudades argentinas con esa característica en esa época…”. En cuanto a la estructura ocupacional, las actividades textiles (donde ubicamos a hilanderas, costureras y tejedoras) registran muy escasos varones. Se trata, sin dudas, de la más importante de las ocupaciones femeninas, representando en 89,22%.
En 1825, el panorama demográfico desolador, arrojaba una cantidad aproximada de 10.000 habitantes. Las causas, ¡ya son conocidas!