LA INEVITABLE BELLEZA DEL LAMENTO
Por María Julia Guizzardi (*)
Es imposible pensar en el inicio de una historia, no se puede registrar conscientemente un inicio pues todo al final termina estando conectado, al momento de escribir no hay inicios, hay conciencias de inicios.
Me costó muchísimo tiempo descubrirlo y un poco más, aceptarlo. Frente al desafío de darme cuenta de mi inicio en la magia de las palabras; me encontré confundida, las palabras están siempre, pero ¿en qué momento empezó ese intercambio energético? ¿en qué momento no me quedó más remedio que escribir? No me malinterpreten, pero me cuesta pedir herramientas extra a la hora de expresar.
Viajé un par de años atrás y me encontré en la casa de mis abuelos con mi abuela, debo haber tenido siete años, estaba viendo las comas que, por fin, empezaban a tener algún sentido. Me habían dado un texto al cual debía ponerle las comas y de pronto, un mundo nuevo.
Mi mayor atracción fue cómo un solo punto con una colita pegada podía cambiar todo con un simple aparecer. “No te quiero”, “No, te quiero”. Orgasmo gramatical. Luego de eso, empecé a prestarle atención a cómo hablaba la gente. Si me perdía una coma, podría perderme un océano de historias y ¿quién quiere perder un océano de historias?
Seguido a eso las estructuras sociales surtieron efecto y me volví chusma, en fin. Pareciera que tenía un imán, las personas me contaban muchas cosas: simples, más complejas, más abstractas; había veces que incluso creía que una fuerza mayor me presentaba un debate.
Escuchar a las personas con atención tiene como efecto colateral la instantánea empatía hacia todo aquello, al menos en mí. Me desafiaba al pensarme en esas situaciones, me planteaba: si vos estuvieras ahí, si eso te pasara a vos, ¿qué harías? De pronto, me encontraba saltando de posibilidad en posibilidad; desde Troya hasta un cuento de hadas; podría ser hermoso, podría ser horrible, podría amar un montón.
Podría sufrir un montón. Y aunque en varios episodios de mi existencia eso fue definitivamente un punto de conflicto para con todas las situaciones que se me presentaban en mi individualidad, fue un “flash”, en dialecto adolescente, darme cuenta de que durante mucho tiempo tenía algo que podía nutrir, algo que podía transformar. “Perspectivas”, un viaje.
Veía gente en la parada del colectivo y pensaba: “¿se amarán? Seguro que tienen una disputa familiar que no los deja estar juntos. Él está cansado, ella muerta de ilusión, cree que lo ama, pero no se da cuenta de que en estos cuarenta minutos no lo ha mirado a los ojos en ningún intercambio de palabras, que ellos llaman conversación”.
Tenía 12 años y millones de palabras que ansiaban explotar en forma de colores, pero como todo púber en su momento, no creía que tuviera sentido ni que fuera importante, ¿qué podría ser tan importante como para decirlo?
Aceptar lo que podemos hacer, es muchas veces más difícil que aceptar lo que no podemos hacer, el autoboicot es característico de cualquier ser humano, más si sos adolescente.
El proceso de cómo empezó esta aceptación del océano de historias que corrían en mí y a mi alrededor ha sido la inevitable belleza del lamento.
No hay inicio reconocible como tal en este viaje, pero qué placer por fin explotar.
(*) Me llamo María Julia Guizzardi, tengo 16 años, soy estudiante, militante y amante de las estrellas. Le temo a las palabras y amo escribir. Digo odiar a los humanos al menos una vez por semana y sin embargo sigo amando. Estoy en constante cambio y después de tanto, ansío la quietud.
Hermoso !! Recomiendo su lectura
Impresionante Julia. Me encantó leer tu relato de los inicios en la escritura. Tu modo fresco y llano de escribir es inspirador y trasmite alegría… Felicitaciones
Hermoso relato ♥️♥️♥️
Felicitaciones !!!!
Muy precioso ese texto
Hermoso! Y un gran futuro con tus 16 años!
Yo descubrí la belleza de las letras de grande! Y te dejo una frase de un filósofo J. Derrida ‘ no hay nada fuera del texto. Todo es lenguaje’
Querida Juli, que agradable sorpresa!
Espero y deseo que este sea el primero de una serie infinita de relatos, y que los compartas.
Felicitaciones!
Que hermoso Julia!! Me encanta, sos admirabl
Que ese mundo de palabras siga creciendo e interconectandose en una red infinita de diálogos, sobre todo con vos misma! Hermoso Juli
Felicitaciones Julita! Sentí tu calidez en cada palabra. Me encantó! Ya quiero leer el próximo.
Siempre es una caricia al alma, encontrar entre un conjunto de palabras, la sorpresa de otra alma. Te felicito, que no sea el único ni el último de los inicios.
Maravilloso Julia!!!… jamas hubiera pensado que tenias esas hermosas cualidades ocultas… DESARROLLALAS!!!
Hermoso leerte… Hermosa vos. Gracias
Julita hermosa, siempre que leo algo tuyo termino en lágrimas, casi como si mi corazón y tus palabras se hicieran uno, solo por capricho. Sos hermosa, te lo he dicho una y mil veces, y te lo voy a seguir diciendo hasta quedarme sin voz, sin tinta, y sin papel. Sos un alma tan cálida, tan llena de vida, tan llena de luz, que es tan lindo estar de paso con vos en este mundo. Seguí escribiendo, por vos, por mi, por los que están y por los que vendrán. El mundo necesita de tus relatos. Un mundo mejor necesita de María Julia Guizzardi.
Hermoso sentir y decir. Transparencia.calidez.
Las palabras nos unen y acercan a los humanos.
Te felicito!
Que hermosa, cuánta frescura y avidez de vida, nostalgia y realismo! Me encanto, ansiosa de más! Felicidades Juli!!!!
Que hermoso!❤️
Que genia!❤
Una genia ju, esta hermoso, que este relato sea el principio de miles! ❤️
Nunca para de decir quién sos y qué creés. Vales más de lo que pensas a diario.
Wow, realmente wow
Muy bueno! Felicitaciones! Nunca dejes de escribir!