EN RACIMO
Fernando Antolín Morales(*)
Tus desmanes vienen en racimo. Siempre. No como las uvas, no, sino como las bombas
de racimo: letales, inmorales, inclementes. Como una tormenta que se desata sin
comerlo ni beberlo, que arrecia sin ton ni son, pero que amaina de a poco, con mucha
voluntad y mano izquierda. Como la lluvia ácida, a veces lleva partículas enquistadas
en el pasado, moléculas que deberían haberse extraviado en el ir y venir alocado de los
años, pequeñas gotas de veneno que esperaba ya filtradas a las cloacas donde se
pierden los recuerdos olvidados.
Pero al final, como los racimos, como los de uvas, y no como las bombas de racimo, al
final, siempre queda tu yo más dulce.
(*) Este texto del autor de Nitra, Eslovaquia obtuvo el primer premio, y
conforma parte del libro: Antología Prosa Poética Homenaje a Raquel
Weinstock.
Su versión digital está disponible en:
Antología Prosa Poética – Homenaje a Raquel Weinstock