Expresiones de la Aldea, San Luis

La última noche del mundo

Teresita Ana Milán 

Las pantallas estallaban con noticias urgentes; recordaban la fecha para apurar la escritura de los cuentos póstumos. Los maestros alentaban a tener conciencia. Los gobernantes dejaron de firmar decretos y se despreocuparon de los presupuestos mientras los bancos repartían lo acumulado. 

Vincent, Matisse y Picasso, untaban sus pinceles, al mismo tiempo, sostenidos por las narices e inspirados por sus bromas. Los barcos amarrados sonaban sus sirenas encantando a Ulises que confundido no encontraba su GPS. Se respiraban sonidos acompasados por el temblor del Machu Pichu y embellecidos por los violines de Bohemia. Piazzolla tocó como nunca el último Nonino y el loco de Ferrer repartía melones en la vendimia. Abrazados Charly García y Mercedes se tiraron desde el balcón del Iguazú embelesados por la Oda a la Alegría. Dante y Beatriz viajaron hacia el país de nunca jamás. Los siete locos con bonetes de colores y zapatos de payasos corrían por la 9 de Julio, mientras que en un bodegón Hamlet comía un bife de chorizo con dulce de leche hasta que se le piantó un lagrimón al ver a Juanito Laguna. Martín Fierro y el Hombre de la Esquina Rosada se midieron a duelo mientras Freud y Einstein, hicieron cumbre en el Aconcagua, jugando a los dados, riéndose del libre albedrío y recitando Balada del Inconsciente.Las estrellas se posaron sobre los edificios, la vía láctea atravesó los continentes y los cometas pasaron en vuelo rasante. Nosotros desnudos y enamorados bailamos hasta el próximo amanecer.

“Danza”, por Henri Matisse (1909-1910).