Recuerdos de la notable Raquel Aljadeff
Editorial
Raquel Aljadeff nació en la ciudad de San Luis en 1936; a los pocos meses de edad contrajo poliomielitis pasando los primeros cinco años de su vida en el Hospital de Niños de Buenos Aires.
Volvió a vivir en San Luis y sin concurrir a la escuela aprendió a leer a los diez años, siendo sus primeros libros los clásicos de la literatura. A los catorce años se dedicó a escribir publicando sus primeros poemas en el diario “La Opinión” y años más tarde en la Revista “San Luis”, órgano de la Asociación de Empleados del Banco de la Provincia. Perteneció a la Peña Cultural “Allá” -fundada por el poeta José Alejandro Lucero en 1956- y participó, ilustrada por Carlos Sánchez Vacca, en el “Primer Concurso Nacional de Poemas Ilustrados” organizado en 1957.
Su primera obra editada, “Alea”, fue firmada con el seudónimo “Aracné”. En ella encontramos catorce poemas, todos tremendamente bellos y tal vez premonitorios.
En el año 1991 por iniciativa de la escritora puntana Paulina Movsichoff, Raquel dio a conocer “Lícito es renunciar” editado por Torres Agüero de Buenos Aires.
Esta publicación reproduce los mismos poemas de su anterior obra editada en San Luis.
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En el año 1992 fue visitada en su domicilio de la calle Colón por el entonces presidente del ICCED, Alberto Rodríguez Saá, a quien Raquel leyó varias de sus poesías.
Rodríguez Saá emocionado por el contenido y la calidad de los poemas que había leído su autora, inmediatamente decidió publicar en la Colección del ICCED una selección de poemas y cuentos.
Fue así como con un prólogo del escritor Jerónimo Castillo, en septiembre de 1992 apareció “Shalom y otras adversidades”, como quinta publicación de la Colección ICCED…
Raquel así se nos presenta como uno de los más extraordinarios casos habidos en nuestra literatura entendiendo por tal esa facultad agudísima que se anticipa a toda experiencia común, un conocimiento esencial de la realidad que no avanza por las vías normales del estudio, sino por otras de velocidad y dimensiones distintas…
La poesía de Raquel es un caso extraordinario de creación pura, en que expresa los íntimos pensamientos y sentimientos de una mujer que se identifica ella misma con el universo. Y es ella misma, no se parece a nadie. De ello ha nacido su unidad que es interior y su valor, que es real y universal. Falleció en 2010 en San Luis.
De «Personalidades de San Luis que dejaron huella”, Susana Gutiérrez de Sánchez Vacca. San Luis Libro. Colección Bicentenario.