Expresiones de la Aldea, Notas Centrales

ACTRICES, ARGENTINAS Y COMPROMETIDAS

Jazmín Stuart es integrante del Colectivo feminista de Actrices Argentinas, describe el recorrido realizado en defensa de los derechos y la lucha por el aborto legal, seguro y gratuito

Por Majo Corvalán

El Colectivo de Actrices Argentinas no para de sorprender. En muy poco tiempo lograron construir alianzas sólidas, organización federal, contenidos propios y la elaboración de insumos para redes con mensajes feministas que interpelan con absoluta profundidad.

Seguro cada integrante tenía sus seguidores y ya estaba instalada en la mesa de cada casa, pero la capacidad que desarrollaron para la construcción de posicionamientos firmes y disruptivos merece admiración.

Recuerdo cuando hace tres años empezaron a sumarse a las acciones callejeras por el aborto legal y generaban todo un revuelo más por sus nombres que por el motivo que las movilizaba a estar ahí, en cambio hoy no hay dudas de que son una organización política y feminista más, de las que traccionan por la ampliación de derechos y por vivir en un mundo más justo e igualitario. 

Jazmín Stuart es directora, actriz, guionista. Desde el inicio forma parte del Colectivo de Actrices Argentinas. Empezó su carrera en “Verano del 98”, imposible no recordarlo. Hizo cine, tablas y TV, hasta sus recientes éxitos, “Tu parte del trato” (2019) y “La fiesta silenciosa” (2020) que reflexiona sobre las distintas formas de violencias por razón de género que sufrimos las mujeres. 

En una entrevista exclusiva para La Opinión/La Voz del Sud, Jazmín Stuart recorre y analiza el camino del colectivo y su lucha por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito.

Con Actrices Argentinas se movilizaron al Congreso en las dos vigilias organizadas para seguir la votación de la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), ¿cuáles eran sus demandas?

El 10 de diciembre, día en que el proyecto de interrupción voluntaria del embarazo logró la media sanción, nos movilizamos para la votación en diputados y en senadores. La demanda es la misma de siempre, la legalización del aborto para terminar con esta doble moral y esta persecución que estamos viviendo desde hace tanto tiempo y por supuesto acompañado del reclamo por educación sexual integral y laica en todas las escuelas del país y acceso gratuito a anticonceptivos.

¿Qué opinión les merece el proyecto del Ejecutivo Nacional?

Analizamos el proyecto y la versión nos parecía que estaba bien acorde al de la Campaña (Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito) salvo la inclusión del artículo que permite la objeción de conciencia individual y alguna otra cuestión relacionada con minoridad.

Después sufrió el cambio más importante que amplió la objeción de conciencia para lo institucional y la cuestión del acompañamiento en personas de 13 a 16 años que puedan requerir la práctica del aborto voluntario.

Por supuesto nos hubiese gustado que esas modificaciones no existieran, pero entendemos que necesitábamos que la ley se apruebe.

¿Qué te hace ruido en relación a la objeción de conciencia?

Esta última modificación me parece peligrosa porque no se menciona como tal pero la está avalando y creo que se vuelve injusto, que el país es demasiado amplio y hay realidades muy distintas, y que una mujer debería poder acceder a un aborto legal, seguro y gratuito en la institución que le quede accesible, y esto no puede estar sesgado por cuestiones de creencias personales, que es lo que hay detrás de esto, porque las instituciones no tienen creencias, son las personas quienes las tienen.

¿Cómo analizás el sector antiaborto en cuanto a estrategias, incidencia, convocatoria y crecimiento?

El sector antiaborto en principio me parece superpoblado de hombres que no es un dato menor, tiene metodologías agresivas de apriete, de escrache, de persecución que va acorde al sector reaccionario al que representan en muchos casos, y por otro lado otra cosa peligrosa es el nivel de ignorancia que queda expuesto en sus argumentos y en su forma de discutir.

Me parece que la ignorancia y la violencia cuando van de la mano son muy peligrosas, y justo desde el movimiento feminista es algo con lo que estamos batallando en muchos ámbitos y sobre distintas temáticas.

¿Cómo viste el escenario actual en comparación con 2018?

Yo tenía la sensación que el escenario era más favorable porque había un camino recorrido de la masificación de este reclamo, todo lo que se inició en 2018 está hoy en la agenda política y mediática.

Eso es bueno porque amplía la empatía respecto al proyecto en la opinión pública, y por otro lado me parece que este gobierno se ha mostrado más solidario con que esto se haga una realidad. Creo que todas las organizaciones feministas que vamos detrás de esta idea de país tenemos que salir a la calle y estar presentes. 

¿Cómo elaboran el mensaje para quienes aún no están convencides sobre el derecho al aborto?

Elaboramos el mensaje igual que cualquier otra organización, no hay mucha diferencia con el mensaje de la Campaña u organismos de derechos humanos que están peleando por esto.

Tenemos acceso a un público más masivo por nuestro oficio, pero el mensaje es el mismo, la seriedad es la misma y los riesgos son inmensos porque al estar más expuestas recibimos más contraofensiva, pero el monto de trabajo y la articulación es la misma.

Jazmín Stuart con el Colectivo feminista de Actrices Argentinas.

¿Se puede incidir en la sociedad desde el arte y la cultura?

Definitivamente se puede incidir desde el arte y la cultura, así fue siempre, es un canal de comunicación social enorme, algo de la narrativa y la ficción siempre ayuda con poder empatizar con muchas realidades, poder ponerse en el lugar del otro y así lograr modificar la realidad.

¿Qué balance hacés tras estos años de construcción del Colectivo de Actrices Argentinas?

En marzo del 2021 vamos a cumplir tres años como organización y la verdad es que todo el saldo es positivo, creemos que nos pudimos articular y organizar con una velocidad asombrosa, estamos super organizadas en el día a día, tenemos innumerables comisiones de trabajo y hacemos un trabajo cotidiano.

Tenemos cada vez más y mejores integrantes que se acoplan al trabajo y traen sus saberes, ya sea en prensa, en la elaboración de spots audiovisuales o en el acompañamiento a víctimas de violencia y abuso.

La verdad es que el resumen es absolutamente positivo, nos hemos expandido y hemos empezado a militar muchas cuestiones que queremos cambiar, cuestiones como el abuso laboral, la brecha salarial, la violencia de género, el abuso, la ESI, la legalización del aborto, la ecología como espacio de militancia feminista.

Estamos trabajando en muchas cosas, organizadas, fuertes y cada vez con más convicción porque esto es el comienzo y cada vez lo haremos de manera más efectiva.

En una performance poderosa, el 10 de diciembre, las actrices se subieron al escenario de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal en la puerta del Congreso y leyeron colectivamente un documento que daba cuenta de la realidad de los abortos clandestinos y el dolor de la falta de acceso a nuestros derechos.

El siguiente, es un fragmento de ese discurso que brindaron Nancy Dupláa, Natalia Badgen, Thelma Fardin, Lucía Stella, Jazmín Stuart, Margarita Molfino, Melisa Melcer, Zuleika Esnal, Alejandra Bavera, Muriel Santa Ana y Laura Azcurra. 

“Sabemos que la ampliación de derechos por la que venimos luchando implica acortar privilegios, por eso decimos basta de hipocresía y doble moral. Ratificamos nuestro derecho a decidir sobre nuestros cuerpos y nuestras vidas. 

Pareciera que todo fue dicho, pero volvamos a decirlo: en Argentina se realizan aproximadamente 1300 abortos por día. Se calcula una cifra que oscila entre 370.000 y 520.000 por año; miles de estos abortos son de niñas menores de 15 años.

Sabemos que abortan mujeres y personas gestantes de todas las clases sociales, edades, contextos, educación y creencias religiosas y es un hecho que cuando toman la decisión de abortar, prefieren arriesgarse a morir antes que seguir adelante con esa gestación. 

Tengamos en cuenta que en estas cifras no figuran aquellas personas que no llegan a ninguna guardia porque murieron víctimas de abortos inseguros y de la desigualdad social. Quien quiera negar este hecho o tergiversar las abrumadoras estadísticas que lo demuestran, está intentando perpetuar una realidad en la que el aborto clandestino o la imposibilidad de hacerlo nos arrojan al sufrimiento, la mutilación o la muerte (…)

Sras y Sres Diputades, el mundo los está mirando. Deben dejar de lado sus creencias personales, comprender de una vez por todas que esto es un problema de salud pública, y ponerse al servicio de toda la población. A quienes siguen dudando, o especulando, deben escucharnos.

A quienes cedieron a las presiones, están a tiempo de dar el paso para que esta situación trágica llegue a su fin. Ustedes tienen la potestad de hacerlo. Esta ley no va a obligar a nadie a abortar.

Pedimos que exista la opción de hacerlo. La maternidad será deseada o no será. La maternidad es un acto de responsabilidad. La decisión de no ser madre, también lo es. Sepan que allí donde persista un régimen restrictivo existirán feminismos organizados.

 Ni una menos por aborto clandestino. 
 Educación sexual para decidir
 Anticonceptivos para no abortar
 Aborto legal, seguro y gratuito para no morir
 ¡Que sea ley!”